“No saben el infierno que es tener esto puesto en un área sin clima”, enfermero del IMSS de Veracruz

Urbis Veracruz

Veracruz, Ver. Un enfermero de la clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de la ciudad de Veracruz, narra el “infierno” que vive al usar el equipo especializado para no contagiarse de coronavirus durante la atención a pacientes.

El trabajador, del llamado IMSS de Díaz Mirón, en el Puerto Jarocho, explica que es casi insoportable el calor pues se ubica en una zona sin aire acondicionado, solo con ventilador.

Ahí mismo, el domingo murió una mujer que era guardia de seguridad en la entrada del hospital debido a complicaciones con el COVID19, además, se reportan casos de empleados que pueden ser sospechosos.

“Sudando como marrano, casi sin poder respirar, el calor te agobia todo el rato y los pensamientos te traicionan…. Tratas de controlarte y sigues atendiendo y sacando adelante a tu paciente…pasan las horas muy lentas, el reloj apenas camina y solo escuchas el ventilador mecánico trabajando”.

El hombre admite que en ocasiones tiene ganas de salir corriendo, pero decide quedarse debido a la responsabilidad que tiene con su profesión y sus compañeros.

“Te sientes fatal, el aire y el calor agobiante hacen lo suyo, ganas de salir corriendo y una voz te dice: ánimo marrano, arriba, son tus compañeros alentando te a salir adelante y no caer. Una palabra de aliento y te sientes mejor, sigues adelante, cuando por fin sales y te quitas todo sientes que la vida te regresa al cuerpo”.

Además, todo el equipo que usa para protegerse y proteger a su familia se lo compró de su propio bolsillo con costos de 180 pesos por la careta, googlees de 220 pesos, mascarilla N95 de 250 pesos, el overol de 200 pesos, guantes de nitrilo 260 pesos.